LAS DECISIONES EN LA PAREJA : DESDE DÓNDE TOMARLAS






Uno de los pasos más complicados en una pareja es la toma de decisiones y la resolución de conflictos. La vida nos expone diariamente ante diferentes opciones entre las que tenemos que elegir. El aprendizaje de un sistema adecuado de solución de problemas permitirá reforzar la pareja y obtener consecuencias positivas de sus decisiones.

El día a día de cualquier persona supone la toma de miles de decisiones más o menos importantes. La mayoría de las personas tienen automatizado el proceso de solución de problemas por el cual acaban decidiéndose por una opción u otra. El aprendizaje juega en este proceso un papel crucial, permitiendo una mejora a través de la valoración de los errores y los aciertos. La acumulación de experiencias positivas generará la reducción del estrés ante los problemas cotidianos y la consiguiente mejora de la autoestima.

La relación de pareja introduce en este proceso un elemento más, “las opiniones y creencias de otra persona”. Esto viene a duplicar y en ocasiones a complicar el proceso de toma de decisiones en la pareja.

Hay que aprender las habilidades que nos permitan aceptar y adaptar a la relación aquellas características de nuestra media naranja que no habíamos pensado tener que “aguantar”





Al iniciar la relación de pareja las expectativas pueden ser tan idealizadas que incluso se cede en exceso para intentar complacer a la otra parte. En este momento los problemas suelen ser pocos y en caso de ocurrir se minimizan. Cuando la relación avanza, comienzan a aparecer las primeras decisiones conjuntos “¿dónde vamos de vacaciones, la playa o la montaña?” “Salimos por tal sitio o por este otro”, “quedamos con tus amigos, o con los míos”, etc.

Es en esta primera etapa de la relación dónde se van a sentar las bases de una buena resolución de conflictos en pareja. La capacidad de escuchar la opinión del otro, la asertividad para expresar nuestras propias necesidades, y la negociación para llegar a una acuerdo, serán lo elementos fundamentales para conseguir salir airosos del conflicto.

Ya comentábamos en un artículo anterior la importancia de escuchar a la otra persona tratando de ponernos en su lugar. En la mayoría de las ocasiones solemos escuchar, pero no siempre intentamos saber lo que siente y lo que quiere decirnos. En muchas ocasiones interpretamos de forma negativa un comentario o una elección diferente a la nuestra. En una pareja no siempre se ha de coincidir en todo y esto no tiene porque significar que se quieran menos. Por tanto debemos preguntar por qué nuestra pareja prefiere la playa o quiere salir con sus amigas o prefiere salir por tal lugar.

Lógicamente, esto no significa que siempre tengamos que hacer lo que nuestra pareja nos propone, sino que tendremos que tener también el “valor” de decirle lo que pensamos o lo que preferimos sin temor a que se enfade. El trabajo es doble, será importante que entendamos lo que nos quiere decir nuestra pareja sin molestarnos por ello y trataremos de decirle lo que nosotros sentimos de la manera más adecuada para que no suponga un comentario crítico (Ver artículo anterior “La comunicación en pareja”)

Si la relación se estabiliza y se da el paso a la convivencia pueden aparecer los primeros conflictos importantes. Los diferentes estilos educativos recibidos, unidos a las expectativas y el tipo de vida que lleve cada uno de los miembros de la pareja, pueden generar multitud de situaciones conflictivas que habrá que ir solventando.

Jacobson (1979) definirá una serie de factores que son importantes, tanto en la atracción inicial como en el desarrollo del conflicto:

• Atractivo inicial

Tiempo de la interacción breve y positivo.
Ausencia de toma de decisiones
Novedad de la comunicación sexual
Expectativas idealizadas

• Desarrollo de conflicto. Surge ante el choque entre las expectativas y la realidad. Aumentará si existe:

Déficit de habilidades.

Deficiencia en control de estímulos.
Cambios en el entorno.
Preferencias discrepantes en cuanto al grado de intimidad deseada.

Uno de los entrenamientos habituales en cualquier terapia de pareja, o en cualquier proceso de mediación familiar, es el de solución de problemas, si bien es cierto, que para llegar a este paso es necesario haber mejorado la comunicación en la pareja y tener un ambiente positivo, cualquier pareja puede beneficiarse de la aplicación de este procedimiento. Las ventajas más claras son:

• Ver los problemas como una búsqueda de soluciones, aprendiendo a describirlos de forma objetiva.
• Aprender una forma adaptativa de enfrentarse ante las dificultades que surgen en la vida cotidiana.
• Consolidar la idea de centrarse en lo positivo y no en lo negativo.
• Conseguir que la pareja madure y salga reforzada ante el éxito de afrontar un problema
• Aplicar el mismo procedimiento en situaciones futuras

En la mayoría de las ocasiones las desavenencias en la pareja puede surgir por conductas de uno u otro miembro que molestan o que interfieren en la propia pareja. En otras ocasiones los problemas surgen por tener que decidir entre dos alternativas opuestas o diferentes. Parta todas ellas la solución de problemas en parejas sería una buen estrategia. Se pude dividir en dos fases:

• Fase de definición del conflicto Es uno de los aspectos más complejos en el campo de la pareja. Se trata de conseguir explicar desde los dos puntos de vista, que es lo nos preocupa o cual es nuestra opinión sobre alguna decisión concreta. Sugerencias que pueden ayudar a la pareja:

· Elegir el momento y lugar para hablar del problema

· Exponer cada uno su punto de vista:

Empezar por algo positivo
Ser específicos y breves
Expresar los sentimientos
Admitir la propia responsabilidad

· Definir el problema debe incluir:

Descripción de la conducta indeseable
Especificación de las situaciones en que ocurre
Descripción e las consecuencias negativas del problema

· No realizar inferencias ni atribuciones personales sobre la conducta de nuestra pareja.

· Discutir solamente un problema cada vez ( No sacar trapos sucios)

• Fase de búsqueda de soluciones En esta fase se intentan plantear y llevar a cabo las posibles soluciones al problema una vez descrito éste. Es importante:

· Centrarse en las soluciones.

No volver al pasado
Utilizar tormenta de ideas
Valorar las ventajas y desventajas para la pareja.

· Seleccionar las soluciones a poner en marcha. El cambio requerirá que ambos participen. Reciprocidad.

· Establecer los medios para conseguir poner en marcha la solución.

· Poner fecha y lugar para valorar la solución.

· Este proceso no debe llevarnos más de una hora


La negociación marital es diferente a otras negociaciones:

• Ceder no implica perder
• Vencer no es convencer.
• Ganar a corto plazo puede suponer perder a largo plazo.
• Los acuerdos se establecen durante un tiempo establecido.
• Evitar el boicot, recordando que se trata de un acuerdo mutuo, y lo difícil que ha sido llegar a él.
• Recordar cual es nuestro objetivo final (encontrarnos bien con nuestra pareja)


D. Alejandro Arribas sánchez.








Seis consejos tibetanos para aprender a vivir




1 No recuerdes, Deja ir lo que ya pasó
Cuando vivimos en función del pasado nos quedamos atrapados en algo que no es real y que solamente puede afectarnos cuando lo recordamos por medio del pensamiento. Debemos usar el pasado únicamente para casos prácticos, como cuando recordamos una ruta o un dato que es relevante en el presente, todo lo demás es innecesario.

2 No imagines, Deja ir lo que puede venir
Vivir en función del futuro genera ansiedad y expectativas, lo cual se convierte en sufrimiento cuando dichas expectativas no se cumplen. Es importante planear nuestro futuro, pero hacerlo sin apego a lo planeado.

3 No pienses, Deja ir lo que sucede ahora
No pensar significa observar el presente sin emitir juicios ni ponerle etiquetas a aquello que percibimos con los sentidos. Por ejemplo, si vemos una rosa, no dejemos que la mente use la palabra “rosa” ya que al hacerlo accede a los recuerdos y categorías que ha almacenado sobre esa flor. Cuando veamos la rosa o cualquier otro objeto o persona no dejemos que la mente le ponga nombre y entonces podremos percibir la realidad pura y desnuda.

4 No examines, No trates de interpretar nada
Las interpretaciones y los juicios deforman nuestra visión de la realidad porque nos obligan a mirar el presente a través de los lentes del pasado. Al hacer esto ya no estamos viendo la realidad sino la proyección de nuestras creencias, prejuicios y paradigmas. Para cumplir este consejo necesitamos eliminar las categorías mentales de “bueno” y “malo” que hacen que percibamos al mundo en blanco y negro, perdiéndonos así de la infinita gama de colores que existen.

5 No controles, No trates de hacer que algo suceda
Esta es la forma más poderosa de oración: soltar todo y dejar que el Tao obre con su inteligencia y nos muestre su designio de forma natural -cuando tratamos de controlar las circunstancias obstaculizamos el fluir del Tao y dejamos que la mente se interponga- para fluir con el Tao se necesita tener la certeza absoluta de que la Vida siempre está de nuestro lado.

6 Descansa y relájate ahora
El sexto consejo nos habla de soltarnos y fluir en el río de la vida en vez de nadar contra la corriente. Esta es la entrega total, cuando lo hacemos conscientemente, la vida empieza a encontrar el rumbo por sí sola y nos lleva a experiencias nunca antes imaginadas, las cuales conducen a nuestro Supremo Despertar. Como en el consejo cinco, necesitamos tener fe en la vida y dejar que esta nos lleve en sus brazos.
 Los seis consejos del Maestro Tilopa ,el gran Maestro tibetano resumen la esencia del Despertar Espiritual.

TODO LO QUE VEO A MI ALREDEDOR ES UNA EXPRESION DE MI MISM@


 
 
"Las relaciones son una herramienta para la evolución espiritual cuya meta última es la unidad en la conciencia. Todos somos inevitablemente parte de la misma conciencia universal, pero los verdaderos avances tienen lugar cuando empezamos a reconocer esa conexión en nuestra vida cotidiana.

Las relaciones son una de las maneras más efectivas para alcanzar la unidad en la conciencia, porque siempre estamos envueltos en relaciones. Piensa en la red de relaciones que mantienes: padres, hijos, amigos, compañeros de trabajo, relaciones amorosas. Todas son, en esencia, experiencias espirituales. Cuando estás enamorado, romántica y profundamente enamorado, tienes una sensación de intemporalidad. En ese momento, estás en paz con la incertidumbre. Te sientes de maravilla, pero vulnerable; sientes cercanía pero también desprotección. Estás transformándote, cambiando, pero sin miedo. Te sientes maravillado. Ésa es una experiencia espiritual.

A través del espejo de las relaciones, de cada una de ellas, descubrimos estados prolongados de conciencia. Tanto aquellos a quienes amamos como aquellos por quienes sentimos rechazo, son espejos de nosotros. ¿Hacia quiénes nos sentimos atraídos? Hacia las personas que tienen características similares a las nuestras, pero eso no es todo. Queremos estar en su compañía porque subconscientemente sentimos que al hacerlo, nosotros podemos manifestar más de esas características. Del mismo modo, sentimos rechazo hacia las personas que nos reflejan las características que negamos en nosotros. Si sientes una fuerte reacción negativa hacia alguien, puedes estar seguro de que tú y esa persona tienen características en común, características que no estás dispuesto a aceptar. Si las aceptaras, no te molestarían.

Cuando reconocemos que podemos vernos en los demás, cada relación se convierte en una herramienta para evolución de nuestra conciencia. Gracias a esta evolución experimentamos estados extendidos de conciencia.

La próxima vez que te sientas atraído por alguien, pregúntate qué te atrajo. ¿Su belleza, gracia, elegancia, autoridad, poder o inteligencia? Cualquier cosa que haya sido, sé consciente de que esa característica también florece en ti. Si prestas atención a esos sentimientos podrás iniciar el proceso de convertirte en ti más plenamente.

Lo mismo se aplica a las personas hacia las que sientes rechazo. Al adoptar más plenamente tu verdadero yo, debes comprender y aceptar tus características menos atractivas. La naturaleza esencial del Universo es la coexistencia de valores opuestos. No puedes ser valeroso si no tienes a un cobarde en tu interior; no puedes ser generoso si no tienes a un tacaño; no puedes ser virtuoso si no tienes la capacidad para actuar con maldad.

Gastamos gran parte de nuestras vidas negando este lado oscuro y terminamos proyectando esas características oscuras en quienes nos rodean. ¿Has conocido personas que atraigan sistemáticamente a su vida a los sujetos equivocados? Normalmente, aquéllas no comprenden por qué les sucede esto una y otra vez, año tras año. No es que atraigan esa oscuridad; es que no están dispuestas a aprobarlas en sus propias vidas. Un encuentro con una persona que no te agrada es una oportunidad para aceptar la paradoja de la coexistencia de los opuestos; de descubrir una nueva faceta de ti. Es otro paso a favor del desarrollo de tu ser espiritual. Las personas más esclarecidas del mundo aceptan todo su potencial de luz y oscuridad. Cuando estás con alguien que reconoce y aprueba sus rasgos negativos, nunca te sientes juzgado. Esto sólo ocurre cuando las personas ven el bien y el mal, lo correcto y lo incorrecto, como características externas.

Cuando estamos dispuestos a aceptar los lados luminoso y oscuro de nuestro ser, podemos empezar a curarnos y a curar nuestras relaciones. Todos somos multidimensionales, omnidimensionales. Todo lo que existe en algún lugar del mundo también existe en nosotros. Cuando aceptamos esos distintos aspectos de nuestro ser, reconocemos nuestra conexión con la conciencia universal y expandimos nuestra conciencia personal.

Las características que distinguimos más claramente en los demás están presentes en nosotros. Cuando seamos capaces de ver en el espejo de las relaciones, podremos empezar a ver nuestro ser completo. Para esto es necesario estar en paz con nuestra ambigüedad, aceptar todos los aspectos de nosotros. Necesitamos reconocer, en un nivel profundo, que tener características negativas no significa que seamos imperfectos. Nadie tiene exclusivamente características positivas. La presencia de características negativas sólo significa que estamos completos; gracias a esa totalidad, podemos acceder más fácilmente a nuestro ser universal, no circunscrito.

Una vez que puedas verte en los demás, será mucho más fácil establecer contacto con ellos y, a través de esa conexión, descubrir la conciencia de la unidad. Éste es el poder del espejo de las relaciones."

- Por Deepak Chopra -